26/10/2010
Vicente López - Ambiente
El viernes a última hora tuvo lugar otra marcha de Unidos por el Río, un colectivo social amplio y heterogéneo de organizaciones de Vicente López, para mostrar su oposición a la construcción de un camino de asfalto a metros del Río de la Plata, en el Paseo de la Costa de Vicente López.
Una vez más la mayoría de los movilizados -que sumaron una buena cantidad para lo que son las manifestaciones en la región- fueron jóvenes sin banderas partidarias, pero que dicen estar convencidos de que las costa se aprovecha más comunitariamente con verde y árboles que con asfalto; con arte, barriletes y solarios que con negocios inmobiliarios.
Salieron al caer el sol desde Puente Saavedra y recorrieron la avenida Maipú hasta la Municipalidad de Vicente López. Los acompañaban adultos de fuerzas políticas, concejales, diputados y vecinos de la zona. Utilizaron uno de los carriles de la avenida en dirección al norte, por lo que no entorpecieron demasiado el tránsito.
En las marchas anteriores, y esta vez, llegaron con bicicletas, skates, de a pié con pancartas escritas por ellos mismos e instrumentos musicales, bombos y platillos, para hacer escuchar el reclamo. Prensa Libre siguió la línea de esta protesta vecinal y sobre todo juvenil desde sus inicios.
Jóvenes, vecinos y organizaciones no dejan de alertar sobre la inconveniencia de la obra. Hace poco se informó de un pedido al Ejecutivo Nacional por parte de la Cámara de Diputados de la Nación para que informe si se cumplieron los pasos legales para hacer la obra, algo que la comuna por ahora no pudo probar fehacientemente.
De hecho, el Intendente intentó organizar reuniones públicas sobre otros temas municipales, pero reculó cuando en todas ellas, sin distinción de lugar, horario o fecha, surgía el tema del vial costero. Ni siquiera la represión policial, para defender las tareas de la contratista privada (Cartellone SA), hizo mella en los vecinos.
El tema se hizo conocido a nivel nacional. La Agrupación de Vecinos estuvo ese viernes en la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires invitada para exponer sobre el tema. Por la noche los jóvenes se disfrazaron con ropas de colores, se maquillaron el rostro y durante la marcha pararon varias veces para bailar y cantar en la avenida.
Uno de los puntos fue la quinta presidencial, llena de policías como si esperaran un ejército invasor más que a vecinos comprometidos y bullangueros. Allí recordaron que varios de los policías que los vigilaban podrían haber sido los que los reprimieron tiempo atrás en la costa.
Entre las consignas el “No al vial costero” fue el más escuchado, lo mismo que “No a la autopista en el río”, pero como desde hace tiempo también el Intendente Enrique García ha dicho públicamente que si la obra se termina en este mandato él se retira los jóvenes le doblaron la apuesta con un: “Andate García/llevate la autovía”
Luego, a las puertas del edificio municipal, armaron un círculo y los chicos disfrazados actuaron en una obra de teatro donde contaron cómo fueron pasando la voz de las obras en el río en todos los barrios que ya recorrieron, y de dónde juntaron varios miles de firmas de vecinos contra la obra.
Por ahora las cosas se mantienen en una meseta. La obra avanza, los jóvenes y organizaciones vecinales se oponen y varias veces retrasaron la llegada de maquinaria con el propio cuerpo hasta que la policía amenaza; la empresa privada alambró el espacio público; los vecinos “desalambraron” un sector.
Un momento crucial, al decir de unos y otros, es cuando las máquinas intenten pasar por el llamado bosquecito, entre San Martín y Arenales. Los árboles de ese lugar, por ordenanza del Deliberativo, son un homenaje a los caídos en Malvinas, por lo tanto para destruirlo debe tomar cartas en el asunto el Concejo.
Por otro lado, allí suele haber acampantes para “resguardar” el lugar y, sin duda, el hecho de que aparezcan las máquinas de las contratista, la mayoría de las veces acompañada por la policía provincial, va a generar nuevamente rispidez, como cuando tiempo atrás tuvo que actuar el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel.
Link Permanente: http://www.sprensalibre.com.ar/index.php?id=3191
Vicente López - Ambiente
El viernes a última hora tuvo lugar otra marcha de Unidos por el Río, un colectivo social amplio y heterogéneo de organizaciones de Vicente López, para mostrar su oposición a la construcción de un camino de asfalto a metros del Río de la Plata, en el Paseo de la Costa de Vicente López.
Una vez más la mayoría de los movilizados -que sumaron una buena cantidad para lo que son las manifestaciones en la región- fueron jóvenes sin banderas partidarias, pero que dicen estar convencidos de que las costa se aprovecha más comunitariamente con verde y árboles que con asfalto; con arte, barriletes y solarios que con negocios inmobiliarios.
Salieron al caer el sol desde Puente Saavedra y recorrieron la avenida Maipú hasta la Municipalidad de Vicente López. Los acompañaban adultos de fuerzas políticas, concejales, diputados y vecinos de la zona. Utilizaron uno de los carriles de la avenida en dirección al norte, por lo que no entorpecieron demasiado el tránsito.
En las marchas anteriores, y esta vez, llegaron con bicicletas, skates, de a pié con pancartas escritas por ellos mismos e instrumentos musicales, bombos y platillos, para hacer escuchar el reclamo. Prensa Libre siguió la línea de esta protesta vecinal y sobre todo juvenil desde sus inicios.
Jóvenes, vecinos y organizaciones no dejan de alertar sobre la inconveniencia de la obra. Hace poco se informó de un pedido al Ejecutivo Nacional por parte de la Cámara de Diputados de la Nación para que informe si se cumplieron los pasos legales para hacer la obra, algo que la comuna por ahora no pudo probar fehacientemente.
De hecho, el Intendente intentó organizar reuniones públicas sobre otros temas municipales, pero reculó cuando en todas ellas, sin distinción de lugar, horario o fecha, surgía el tema del vial costero. Ni siquiera la represión policial, para defender las tareas de la contratista privada (Cartellone SA), hizo mella en los vecinos.
El tema se hizo conocido a nivel nacional. La Agrupación de Vecinos estuvo ese viernes en la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires invitada para exponer sobre el tema. Por la noche los jóvenes se disfrazaron con ropas de colores, se maquillaron el rostro y durante la marcha pararon varias veces para bailar y cantar en la avenida.
Uno de los puntos fue la quinta presidencial, llena de policías como si esperaran un ejército invasor más que a vecinos comprometidos y bullangueros. Allí recordaron que varios de los policías que los vigilaban podrían haber sido los que los reprimieron tiempo atrás en la costa.
Entre las consignas el “No al vial costero” fue el más escuchado, lo mismo que “No a la autopista en el río”, pero como desde hace tiempo también el Intendente Enrique García ha dicho públicamente que si la obra se termina en este mandato él se retira los jóvenes le doblaron la apuesta con un: “Andate García/llevate la autovía”
Luego, a las puertas del edificio municipal, armaron un círculo y los chicos disfrazados actuaron en una obra de teatro donde contaron cómo fueron pasando la voz de las obras en el río en todos los barrios que ya recorrieron, y de dónde juntaron varios miles de firmas de vecinos contra la obra.
Por ahora las cosas se mantienen en una meseta. La obra avanza, los jóvenes y organizaciones vecinales se oponen y varias veces retrasaron la llegada de maquinaria con el propio cuerpo hasta que la policía amenaza; la empresa privada alambró el espacio público; los vecinos “desalambraron” un sector.
Un momento crucial, al decir de unos y otros, es cuando las máquinas intenten pasar por el llamado bosquecito, entre San Martín y Arenales. Los árboles de ese lugar, por ordenanza del Deliberativo, son un homenaje a los caídos en Malvinas, por lo tanto para destruirlo debe tomar cartas en el asunto el Concejo.
Por otro lado, allí suele haber acampantes para “resguardar” el lugar y, sin duda, el hecho de que aparezcan las máquinas de las contratista, la mayoría de las veces acompañada por la policía provincial, va a generar nuevamente rispidez, como cuando tiempo atrás tuvo que actuar el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel.
Link Permanente: http://www.sprensalibre.com.ar/index.php?id=3191
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