No hubo maltrato físico, sí algunas agresiones verbales como “lo
estamos pidiendo por las buenas” o callando a una vecina “señora, con ud no
estoy hablando, le hablo a él”, en clara señal de provocación a un compañero. Es
por esto que queremos dar un mensaje de alerta, incentivo y convicción. Este
tipo de situaciones son las que evidencian toda la mugre que hay detrás de los
negociados de los dirigentes de turno y la forma de manejarse que tienen cuando
estas mismas fuentes de dinero se ven amenazadas.
Desde este espacio queremos manifestar y transmitir todo nuestro
malestar y repudio para la política de intimidación y patoterismo que ejerce la
fuerza municipal sobre los ciudadanos que quieren darle un mensaje a la
comunidad toda. Exigimos que se respete la libertad de acción y expresión para
todos los vecinos y vecinas.
La lucha continua!
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